press release

Exposición en Itaú Cultural evoca un diálogo sobre
la noche en la producción fotográfica latinoamericana

 

En Ainda Há Noite/Nos Queda la Noche, más de 300 imágenes revelan las inquietudes y la poética de fotógrafos procedentes de ocho países de la región. La exposición está vinculada a la quinta edición del Foro Latinoamericano de Fotografía de São Paulo, con enfoque en la producción fotográfica de América Latina y curaduría del instituto, junto con Claudi Carreras e Iatã Cannabrava, quienes son también curadores de la muestra.

 

 

La muestra Ainda Há Noite/Nos Queda la Noche se abre el día 12 de junio (miércoles), a partir de las 20h, y sigue en cartel hasta el 11 de agosto, en los pisos 1 y -1 de Itaú Cultural. La exposición presenta 10 proyectos de 11 fotógrafos y un editor originarios de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Guatemala, México, Perú y Uruguay, además de España y Reino Unido. Bajo el velo del tema, la noche, las imágenes de esta exposición dialogan con temas contemporáneos presentes en esta porción continental —de la omnipresencia de los celulares, la violencia, las manifestaciones sociales y la resiliencia al trabajo nocturno y la memoria—.

 

Con curaduría de Claudi Carreras e Iatã Cannabrava — el primero es español, de Cataluña, y el segundo es brasileño—, la exposición reúne más de 300 imágenes presentadas en diversos soportes, que recurren a las horas nocturnas para pensar sobre América Latina. Así, la muestra sugiere que hay aspectos de las identidades y las realidades latinoamericanas que sólo se revelan o se ven con más precisión en las horas en que la luz natural cede espacio a la de la noche.

 

La serie Píxeles, del argentino Alejandro Chaskielberg, trae una mezcla de poesía y crítica al proponer entender a las personas como píxeles de una gran imagen global. Grupos de hombres y mujeres están juntos en bucólicos paisajes nocturnos iluminados sólo por las luces de colores que salen de sus teléfonos móviles y los hipnotizan. Vistas en detalle, las imágenes revelan a personas atrapadas por las pantallas.

 

De Chile viene la serie del dúo Alejandro y Cristóbal Olivares, Chile 874. Aunque se capturaron en aquel país, las imágenes cargan una truculenta realidad conocida en los demás territorios sudamericanos. Las fotos retratan el período entre 2011 y 2013, cuando miles de profesores, estudiantes y sus padres tomaron las calles de Chile para protestar contra el gobierno y la ganancia obtenida con las políticas educativas. Las manifestaciones fueron reprimidas por la policía, que arrestaba a los manifestantes y usaba gas lacrimógeno y fuerza física contra la multitud. El número 874 agregado al título de la serie representa la cantidad de jóvenes detenidos en un sólo día.

 

Historia Natural del Silencio, del colombiano Jorge Panchoaga, también trata de la violencia sufrida por los ciudadanos latinoamericanos. La serie aborda un período en que, según el fotógrafo, una generación de hombres y mujeres entró en el mundo de la clandestinidad en las diferentes ciudades colombianas, como refugio o en articulación entre la economía del narcotráfico y la sociedad. En este contexto, las imágenes revelan a un pueblo marcado por la violencia y atrapado a la necesidad de olvidar o de enfrentar su pasado.

 

En Insidia, el guatemalteco Juan Brenner hace una metáfora entre la audacia de tomar fotos por la noche en la ciudad de Guatemala, una actividad osada, y la actitud despreocupada de los seres nocturnos. Sus imágenes presentan a paisanos en momentos nocturnos, como alegorías contemporáneas de quienes buscan un aliento en jornadas incansables.

 

Un ensayo sobre la resiliencia de quienes han sido tocados por la violencia en algún momento de sus vidas es lo que se ve en la serie de fotografías Luciérnaga, del mexicano Yael Martínez. En su obra, el artista explora con frecuencia los efectos de la pobreza y del crimen organizado en Guerrero, uno de los estados mexicanos más necesitados y violentos. En esta serie, él da voz a personas silenciadas por la trágica memoria de largos días transformados en sombras de la noche.

 

La peruana Gihan Tubbeh evoca un habla femenina en De tiempo en tiempo un volcán estalla.  Sus imágenes sugieren una jornada onírica y alegórica a la condición femenina dentro del universo, en una construcción poética por medio de la asociación de signos de la naturaleza con el ser humano y los animales.

 

A su vez, la brasileña Luisa Dörr presenta, en Basal, a los trabajadores nocturnos de la ciudad que la mantienen vibrante para que, al despertar, todo esté en pleno funcionamiento. Ella utiliza el término “basal” en una referencia al metabolismo así denominado para explicar la energía que el cuerpo requiere para mantener las funciones esenciales.

 

El dúo hispano-brasileño, Cristina De Middel y Bruno Morais —ella de Alicante y él de Río de Janeiro— utiliza narrativas construidas para ilustrar el actual contexto económico y político, utilizando animales nocturnos como actores improvisados. La serie que ellos presentan se llama Boa noite, povo y en ella investigan visualmente, por medio de experimentos semiperformáticos, la relación que existe entre lo cultural y lo natural. Sus fotos mezclan intervención en archivo, dirección de escena animal, fotografía nocturna e intervenciones plásticas en recortes periodísticos para mostrar la complejidad del momento y las resonancias del pasado.

 

El icónico Palacio Salvo, un edificio de 95 metros de altura y 27 pisos situado en Montevideo, es el telón de fondo utilizado por el uruguayo Ignacio Iturrioz para realizar Purgatorio. Él vivió algunos años en este edificio, que alberga un universo particular y fue diseñado por el arquitecto Mario Palanti, un inmigrante italiano que vivía en Buenos Aires. Inaugurado en 1928, fue considerado en esa época la torre más alta de América del Sur.  En esta serie, sin embargo, no es más que un escenario, pues las imágenes evocan a los personajes y animales que allí habitan como si estuvieran refugiados en un inmenso y oscuro sótano, donde el tiempo es siempre noche.

 

Moon Shadows es una serie de fotos provenientes del Archive of Modern Conflict, un acervo particular con sede en Londres, editada por el norteamericano Kalev Erickson. Estas imágenes exploran algunas de las relaciones entre el consciente y el inconsciente. Representan momentos fugaces encontrados entre el estar despierto y el estar dormido, fragmentos de sueños lúcidos y memoria fundidos para producir narrativas inciertas.

 

V Foro Latinoamericano de Fotografía de São Paulo

 

Esta exposición está vinculada a la quinta edición del Foro Latinoamericano de Fotografía de São Paulo, que tiene curaduría de Itaú Cultural en conjunto con los curadores de la exposición Claudi Carreras e Iatã Cannabrava.

 

 

 

 

 

información general

 

Ainda Há Noite/Nos Queda la Noche

Exposición de Fotografia Latinoamericana

Vinculada al V Foro Latinoamericano de Fotografía

Curaduría: Claudi Carreras e Iatã Cannabrava

Apertura: 12 de junio (miércoles), a las 20h

Visitación: Del 13 de junio al 11 de agosto

De martes a viernes, de las 9h a las 20h (permanencia hasta las 20h30)

Sábados, domingos y fiestas, de las 11h a las 20h

Pisos: 1 y -1

 

V Foro Latinoamericano de Fotografía

Del 13 al 16 de junio (jueves a domingo)

Salas y horarios variados, consulte la programación

 

Itaú Cultural

Avenida Paulista, 149, Estação Brigadeiro do Metrô

Tels.: + 55 11. 2168-1777

Acceso para minusválidos

Aire condicionado

Aparcamiento: Entrada por la Rua Leôncio de Carvalho, 108

Si el visitante sella el billete el recepción del Itaú Cultural:

3 horas: R$ 7; 4 horas: R$ 9; 5 a 12 horas: R$ 10.

Con valet y seguro, gratuito para bicicletas.

     

 

 

 

Realização:

 

 

 

 

 

 

Asesoramiento de Prensa: Conteúdo Comunicação

Tel.: +55 11 5056 9800

 

No Itaú Cultural:

Tel.: +55 11.2168-1950

Tel.: +55 11.2168-1906

 

 

 

 

2019 - DESENVOLVIDO PELA CONTEÚDO COMUNICAÇÃO

 

 

press release

Exposición en Itaú Cultural evoca un diálogo sobre
la noche en la producción fotográfica latinoamericana

 

En Ainda Há Noite/Nos Queda la Noche, más de 300 imágenes revelan las inquietudes y la poética de fotógrafos procedentes de ocho países de la región. La exposición está vinculada a la quinta edición del Foro Latinoamericano de Fotografía de São Paulo, con enfoque en la producción fotográfica de América Latina y curaduría del instituto, junto con Claudi Carreras e Iatã Cannabrava, quienes son también curadores de la muestra.

 

 

La muestra Ainda Há Noite/Nos Queda la Noche se abre el día 12 de junio (miércoles), a partir de las 20h, y sigue en cartel hasta el 11 de agosto, en los pisos 1 y -1 de Itaú Cultural. La exposición presenta 10 proyectos de 11 fotógrafos y un editor originarios de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Guatemala, México, Perú y Uruguay, además de España y Reino Unido. Bajo el velo del tema, la noche, las imágenes de esta exposición dialogan con temas contemporáneos presentes en esta porción continental —de la omnipresencia de los celulares, la violencia, las manifestaciones sociales y la resiliencia al trabajo nocturno y la memoria—.

 

Con curaduría de Claudi Carreras e Iatã Cannabrava — el primero es español, de Cataluña, y el segundo es brasileño—, la exposición reúne más de 300 imágenes presentadas en diversos soportes, que recurren a las horas nocturnas para pensar sobre América Latina. Así, la muestra sugiere que hay aspectos de las identidades y las realidades latinoamericanas que sólo se revelan o se ven con más precisión en las horas en que la luz natural cede espacio a la de la noche.

 

La serie Píxeles, del argentino Alejandro Chaskielberg, trae una mezcla de poesía y crítica al proponer entender a las personas como píxeles de una gran imagen global. Grupos de hombres y mujeres están juntos en bucólicos paisajes nocturnos iluminados sólo por las luces de colores que salen de sus teléfonos móviles y los hipnotizan. Vistas en detalle, las imágenes revelan a personas atrapadas por las pantallas.

 

De Chile viene la serie del dúo Alejandro y Cristóbal Olivares, Chile 874. Aunque se capturaron en aquel país, las imágenes cargan una truculenta realidad conocida en los demás territorios sudamericanos. Las fotos retratan el período entre 2011 y 2013, cuando miles de profesores, estudiantes y sus padres tomaron las calles de Chile para protestar contra el gobierno y la ganancia obtenida con las políticas educativas. Las manifestaciones fueron reprimidas por la policía, que arrestaba a los manifestantes y usaba gas lacrimógeno y fuerza física contra la multitud. El número 874 agregado al título de la serie representa la cantidad de jóvenes detenidos en un sólo día.

 

Historia Natural del Silencio, del colombiano Jorge Panchoaga, también trata de la violencia sufrida por los ciudadanos latinoamericanos. La serie aborda un período en que, según el fotógrafo, una generación de hombres y mujeres entró en el mundo de la clandestinidad en las diferentes ciudades colombianas, como refugio o en articulación entre la economía del narcotráfico y la sociedad. En este contexto, las imágenes revelan a un pueblo marcado por la violencia y atrapado a la necesidad de olvidar o de enfrentar su pasado.

 

En Insidia, el guatemalteco Juan Brenner hace una metáfora entre la audacia de tomar fotos por la noche en la ciudad de Guatemala, una actividad osada, y la actitud despreocupada de los seres nocturnos. Sus imágenes presentan a paisanos en momentos nocturnos, como alegorías contemporáneas de quienes buscan un aliento en jornadas incansables.

 

Un ensayo sobre la resiliencia de quienes han sido tocados por la violencia en algún momento de sus vidas es lo que se ve en la serie de fotografías Luciérnaga, del mexicano Yael Martínez. En su obra, el artista explora con frecuencia los efectos de la pobreza y del crimen organizado en Guerrero, uno de los estados mexicanos más necesitados y violentos. En esta serie, él da voz a personas silenciadas por la trágica memoria de largos días transformados en sombras de la noche.

 

La peruana Gihan Tubbeh evoca un habla femenina en De tiempo en tiempo un volcán estalla.  Sus imágenes sugieren una jornada onírica y alegórica a la condición femenina dentro del universo, en una construcción poética por medio de la asociación de signos de la naturaleza con el ser humano y los animales.

 

A su vez, la brasileña Luisa Dörr presenta, en Basal, a los trabajadores nocturnos de la ciudad que la mantienen vibrante para que, al despertar, todo esté en pleno funcionamiento. Ella utiliza el término “basal” en una referencia al metabolismo así denominado para explicar la energía que el cuerpo requiere para mantener las funciones esenciales.

 

El dúo hispano-brasileño, Cristina De Middel y Bruno Morais —ella de Alicante y él de Río de Janeiro— utiliza narrativas construidas para ilustrar el actual contexto económico y político, utilizando animales nocturnos como actores improvisados. La serie que ellos presentan se llama Boa noite, povo y en ella investigan visualmente, por medio de experimentos semiperformáticos, la relación que existe entre lo cultural y lo natural. Sus fotos mezclan intervención en archivo, dirección de escena animal, fotografía nocturna e intervenciones plásticas en recortes periodísticos para mostrar la complejidad del momento y las resonancias del pasado.

 

El icónico Palacio Salvo, un edificio de 95 metros de altura y 27 pisos situado en Montevideo, es el telón de fondo utilizado por el uruguayo Ignacio Iturrioz para realizar Purgatorio. Él vivió algunos años en este edificio, que alberga un universo particular y fue diseñado por el arquitecto Mario Palanti, un inmigrante italiano que vivía en Buenos Aires. Inaugurado en 1928, fue considerado en esa época la torre más alta de América del Sur.  En esta serie, sin embargo, no es más que un escenario, pues las imágenes evocan a los personajes y animales que allí habitan como si estuvieran refugiados en un inmenso y oscuro sótano, donde el tiempo es siempre noche.

 

Moon Shadows es una serie de fotos provenientes del Archive of Modern Conflict, un acervo particular con sede en Londres, editada por el norteamericano Kalev Erickson. Estas imágenes exploran algunas de las relaciones entre el consciente y el inconsciente. Representan momentos fugaces encontrados entre el estar despierto y el estar dormido, fragmentos de sueños lúcidos y memoria fundidos para producir narrativas inciertas.

 

V Foro Latinoamericano de Fotografía de São Paulo

 

Esta exposición está vinculada a la quinta edición del Foro Latinoamericano de Fotografía de São Paulo, que tiene curaduría de Itaú Cultural en conjunto con los curadores de la exposición Claudi Carreras e Iatã Cannabrava.

 

 

 

 

 

información general

 

Ainda Há Noite/Nos Queda la Noche

Exposición de Fotografia Latinoamericana

Vinculada al V Foro Latinoamericano de Fotografía

Curaduría: Claudi Carreras e Iatã Cannabrava

Apertura: 12 de junio (miércoles), a las 20h

Visitación: Del 13 de junio al 11 de agosto

De martes a viernes, de las 9h a las 20h (permanencia hasta las 20h30)

Sábados, domingos y fiestas, de las 11h a las 20h

Pisos: 1 y -1

 

V Foro Latinoamericano de Fotografía

Del 13 al 16 de junio (jueves a domingo)

Salas y horarios variados, consulte la programación

 

Itaú Cultural

Avenida Paulista, 149, Estação Brigadeiro do Metrô

Tels.: + 55 11. 2168-1777

Acceso para minusválidos

Aire condicionado

Aparcamiento: Entrada por la Rua Leôncio de Carvalho, 108

Si el visitante sella el billete el recepción del Itaú Cultural:

3 horas: R$ 7; 4 horas: R$ 9; 5 a 12 horas: R$ 10.

Con valet y seguro, gratuito para bicicletas.

     

 

 

 

Realização:

 

 

 

 

 

 

Asesoramiento de Prensa: Conteúdo Comunicação

Tel.: +55 11 5056 9800

 

No Itaú Cultural:

Tel.: +55 11.2168-1950

Tel.: +55 11.2168-1906

 

 

 

 

2019 - DESENVOLVIDO PELA CONTEÚDO COMUNICAÇÃO

 

 

press release

Exposición en Itaú Cultural evoca un diálogo sobre la noche en la producción fotográfica latinoamericana

 

En Ainda Há Noite/Nos Queda la Noche, más de 300 imágenes revelan las inquietudes y la poética de fotógrafos procedentes de ocho países de la región. La exposición está vinculada a la quinta edición del Foro Latinoamericano de Fotografía de São Paulo, con enfoque en la producción fotográfica de América Latina y curaduría del instituto, junto con Claudi Carreras e Iatã Cannabrava, quienes son también curadores de la muestra.

 

 

La muestra Ainda Há Noite/Nos Queda la Noche se abre el día 12 de junio (miércoles), a partir de las 20h, y sigue en cartel hasta el 11 de agosto, en los pisos 1 y -1 de Itaú Cultural. La exposición presenta 10 proyectos de 11 fotógrafos y un editor originarios de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Guatemala, México, Perú y Uruguay, además de España y Reino Unido. Bajo el velo del tema, la noche, las imágenes de esta exposición dialogan con temas contemporáneos presentes en esta porción continental —de la omnipresencia de los celulares, la violencia, las manifestaciones sociales y la resiliencia al trabajo nocturno y la memoria—.

 

Con curaduría de Claudi Carreras e Iatã Cannabrava — el primero es español, de Cataluña, y el segundo es brasileño—, la exposición reúne más de 300 imágenes presentadas en diversos soportes, que recurren a las horas nocturnas para pensar sobre América Latina. Así, la muestra sugiere que hay aspectos de las identidades y las realidades latinoamericanas que sólo se revelan o se ven con más precisión en las horas en que la luz natural cede espacio a la de la noche.

 

La serie Píxeles, del argentino Alejandro Chaskielberg, trae una mezcla de poesía y crítica al proponer entender a las personas como píxeles de una gran imagen global. Grupos de hombres y mujeres están juntos en bucólicos paisajes nocturnos iluminados sólo por las luces de colores que salen de sus teléfonos móviles y los hipnotizan. Vistas en detalle, las imágenes revelan a personas atrapadas por las pantallas.

 

De Chile viene la serie del dúo Alejandro y Cristóbal Olivares, Chile 874. Aunque se capturaron en aquel país, las imágenes cargan una truculenta realidad conocida en los demás territorios sudamericanos. Las fotos retratan el período entre 2011 y 2013, cuando miles de profesores, estudiantes y sus padres tomaron las calles de Chile para protestar contra el gobierno y la ganancia obtenida con las políticas educativas. Las manifestaciones fueron reprimidas por la policía, que arrestaba a los manifestantes y usaba gas lacrimógeno y fuerza física contra la multitud. El número 874 agregado al título de la serie representa la cantidad de jóvenes detenidos en un sólo día.

 

Historia Natural del Silencio, del colombiano Jorge Panchoaga, también trata de la violencia sufrida por los ciudadanos latinoamericanos. La serie aborda un período en que, según el fotógrafo, una generación de hombres y mujeres entró en el mundo de la clandestinidad en las diferentes ciudades colombianas, como refugio o en articulación entre la economía del narcotráfico y la sociedad. En este contexto, las imágenes revelan a un pueblo marcado por la violencia y atrapado a la necesidad de olvidar o de enfrentar su pasado.

 

En Insidia, el guatemalteco Juan Brenner hace una metáfora entre la audacia de tomar fotos por la noche en la ciudad de Guatemala, una actividad osada, y la actitud despreocupada de los seres nocturnos. Sus imágenes presentan a paisanos en momentos nocturnos, como alegorías contemporáneas de quienes buscan un aliento en jornadas incansables.

 

Un ensayo sobre la resiliencia de quienes han sido tocados por la violencia en algún momento de sus vidas es lo que se ve en la serie de fotografías Luciérnaga, del mexicano Yael Martínez. En su obra, el artista explora con frecuencia los efectos de la pobreza y del crimen organizado en Guerrero, uno de los estados mexicanos más necesitados y violentos. En esta serie, él da voz a personas silenciadas por la trágica memoria de largos días transformados en sombras de la noche.

 

La peruana Gihan Tubbeh evoca un habla femenina en De tiempo en tiempo un volcán estalla.  Sus imágenes sugieren una jornada onírica y alegórica a la condición femenina dentro del universo, en una construcción poética por medio de la asociación de signos de la naturaleza con el ser humano y los animales.

 

A su vez, la brasileña Luisa Dörr presenta, en Basal, a los trabajadores nocturnos de la ciudad que la mantienen vibrante para que, al despertar, todo esté en pleno funcionamiento. Ella utiliza el término “basal” en una referencia al metabolismo así denominado para explicar la energía que el cuerpo requiere para mantener las funciones esenciales.

 

El dúo hispano-brasileño, Cristina De Middel y Bruno Morais —ella de Alicante y él de Río de Janeiro— utiliza narrativas construidas para ilustrar el actual contexto económico y político, utilizando animales nocturnos como actores improvisados. La serie que ellos presentan se llama Boa noite, povo y en ella investigan visualmente, por medio de experimentos semiperformáticos, la relación que existe entre lo cultural y lo natural. Sus fotos mezclan intervención en archivo, dirección de escena animal, fotografía nocturna e intervenciones plásticas en recortes periodísticos para mostrar la complejidad del momento y las resonancias del pasado.

 

El icónico Palacio Salvo, un edificio de 95 metros de altura y 27 pisos situado en Montevideo, es el telón de fondo utilizado por el uruguayo Ignacio Iturrioz para realizar Purgatorio. Él vivió algunos años en este edificio, que alberga un universo particular y fue diseñado por el arquitecto Mario Palanti, un inmigrante italiano que vivía en Buenos Aires. Inaugurado en 1928, fue considerado en esa época la torre más alta de América del Sur.  En esta serie, sin embargo, no es más que un escenario, pues las imágenes evocan a los personajes y animales que allí habitan como si estuvieran refugiados en un inmenso y oscuro sótano, donde el tiempo es siempre noche.

 

Moon Shadows es una serie de fotos provenientes del Archive of Modern Conflict, un acervo particular con sede en Londres, editada por el norteamericano Kalev Erickson. Estas imágenes exploran algunas de las relaciones entre el consciente y el inconsciente. Representan momentos fugaces encontrados entre el estar despierto y el estar dormido, fragmentos de sueños lúcidos y memoria fundidos para producir narrativas inciertas.

 

V Foro Latinoamericano de Fotografía de São Paulo

 

Esta exposición está vinculada a la quinta edición del Foro Latinoamericano de Fotografía de São Paulo, que tiene curaduría de Itaú Cultural en conjunto con los curadores de la exposición Claudi Carreras e Iatã Cannabrava.

 

 

 

 

 

información general

 

Ainda Há Noite/
Nos Queda la Noche

Exposición de Fotografia Latinoamericana

Vinculada al V Foro Latinoamericano
de Fotografía

Curaduría: Claudi Carreras e Iatã Cannabrava

Apertura: 12 de junio (miércoles), a las 20h

Visitación: Del 13 de junio al 11 de agosto

De martes a viernes, de las 9h a las 20h (permanencia hasta las 20h30)

Sábados, domingos y fiestas, de las 11h
a las 20h

Pisos: 1 y -1

 

V Foro Latinoamericano
de Fotografía

Del 13 al 16 de junio (jueves a domingo)

Salas y horarios variados, consulte la programación

 

Itaú Cultural

Avenida Paulista, 149, Estação Brigadeiro
do Metrô

Tels.: + 55 11. 2168-1777

Acceso para minusválidos

Aire condicionado

Aparcamiento: Entrada por la Rua Leôncio
de Carvalho, 108

Si el visitante sella el billete el recepción
del Itaú Cultural:

3 horas: R$ 7; 4 horas: R$ 9; 5 a 12 horas:
R$ 10.

Con valet y seguro, gratuito para bicicletas.

     

 

 

 

Realização:

 

 

 

 

 

 

Asesoramiento de Prensa:
Conteúdo Comunicação

Tel.: +55 11 5056 9800

 

No Itaú Cultural:

Tel.: +55 11.2168-1950

Tel.: +55 11.2168-1906

 

 

 

 

2019 - DESENVOLVIDO PELA CONTEÚDO COMUNICAÇÃO